Una de las cosas que primero se aprenden cuando uno comienza en el mundo del radiocontrol es: “cuidado con farolas, árboles y bordillos”, junto a la otra gran máxima de: “un coche RC no se le presta a cualquiera”. Parece que el chico de este vídeo no tenía clara la primera norma y en plena recta y con gas a fondo se estrella contra un árbol, arrancando de cuajo el tren delantero a su coche radiocontrol.
Recordad siempre tener cuidado y sobre todo, utilizad los coches radiocontrol en espacios habilitados para tal fin, como circuitos o similares y en caso de tener que usarlos en la vía pública, buscad un espacio amplio e intentad que no haya gente cerca, podríais herir a alguien.